viernes, 4 de febrero de 2011

Del Impresionismo al Postimpresionismo

El impresionismo es un movimiento artístico que surgió en Francia y se pude considerar como el punto de inflexión en la evolución de la pintura hacia el siglo XX. El impresionismo se caracteriza por ser un movimiento innovador. Es la creación de varios pintores que tienen la voluntad consciente de llevar a cabo determinados cambios dentro de la pintura oponiéndose a la de corte tradicional.
Los primeros antecedentes se encuentran en la Escuela Veneciana, en la que el color constituía una auténtica prioridad y la pincelada era suelta y ligera.
El impresionismo en sus comienzos no tuvo una gran aceptación ni por parte del público, ni de la crítica, los que consideraban a la técnica impresionista incorrecta. Tan sólo una minoría,entre las que se encontraba el escritor y crítico de arte Émile Zola, miraban el impresionismo con agrado. El término Impresionismo conlleva una fuerte carga negativa. Fue acuñado por el crítico de arte Louis Leroy a raíz de la exposición del cuadro “Impresión: sol naciente”, de Monet.
Los seguidores del movimiento realizaban una búsqueda científica y filosófica de la realidad. Defendían la idea de que los objetos no siempre aparecen bien delimitados, ni con colores nítidos, sino que según la luz, la hora del día, las condiciones atmosféricas, las figuras cambian de forma y de color. Pretendían representar, la naturaleza en constante movimiento. La luz es por tanto,uno de los elementos fundamentales de la pintura impresionista. Se busca trasladar al lienzo,las sensaciones que se producen cuando la materia es acariciada por la luz.
El protagonista indiscutible de las obras impresionistas es “el paisaje”, que hasta este momento había sido considerado un tema secundario, excepto en la pintura holandesa. Las representaciones del paisaje se hacían directamente del natural. El pintor se trasladaba al lugar que quería pintar para captarlo en ese instante en concreto, y esto se denominó pintura à plein air.
La pincelada impresionista es suelta, rápida y vigorosa. La técnica esta dictada por la prisa y generalmente se emplea gran cantidad de materia pictórica. La llamada teoría de los colores, que sostiene que existen colores primarios y colores complementarios, era conocida y utilizada por los impresionistas. Otro rasgo característico del movimiento, es el uso exclusivo de colores puros sin mezcla, estos solían ser claros y brillantes, casi con completa ausencia del negro. La sombra nunca es negra en un cuadro impresionista,sino del color complementario correspondiente. Eliminan los contornos y el dibujo pierde la gran importancia que había tenido hasta ese momento.
También hay que destacar la gran influencia que ejerció la fotografía sobre la pintura impresionista. Se estableció una cierta relación entre los pintores del Impresionismo y algunos fotógrafos como Nadar,quien actuó como su protector al acoger en su casa la primera exposición de este grupo de pintores.
Debemos destacar entre los pintores del Impresionismo a Eduard Manet (1832-1883) que sirvió como puente entre el realismo e impresionismo y podría ser considerado el eje alrededor del cual se forjó el grupo de los impresionistas. Estableció la técnica de la pincelada rápida y ligera por eso se dice que fue el precursor del movimiento.
Por otro lado, Monet (1840-1926) considerado el más puro de los impresionistas,es uno de los pintores que más contribuye al movimiento, al que se mantuvo fiel hasta el día de su muerte. Sus temas favoritos son las marinas, las escenas fluviales y por supuesto los paisajes.
Otros pintores impresionistas a destacar, son Degas (1834-1917), que estaba más relacionado con el movimiento por la forma que por el color y cuyo tema mas característico es el de bailarinas.
Renoir (1841-1919), que en sus obras expresa la alegría de vivir, con personajes que se divierten, en una naturaleza agradable. Sisley (1839-1899) que al igual que Monet fue fiel al movimiento y fue exclusivamente pintor paisajista y por último, Pisarro (1830-1903) que realizó un intenso estudio de la luz y el color, y con él, se realizó el paso hacia el postimpresionismo.
El Impresionismo,tras arraigar con fuerza en Francia alrededor de 1880, comenzó a extenderse fuera de estas fronteras, y también aparecen una serie de pintores que lo revisan. Lo toman como punto de partida para llegar a una evolución personal que tendrá gran trascendencia en la pintura del siglo XX y que se denominará postimpresionismo.
Los autores de este nuevo movimiento, aunque son muy independientes tienen casi todos en común la recuperación de la línea y el dibujo, vuelven a delimitar los contornos de los objetos de forma precisa. De esta forma se alejan de la realidad borrosa y desdibujada del impresionismo. Sin embargo los postimpresionistas no hacen una pintura realista, ya que normalmente podemos encontrarnos que en sus cuadros no hay una perspectiva real ni colores acordes con la realidad.
Entre los grandes postimpresionistas debemos mencionar a Paul Cezanne, pintor muy poco conocido en su época aunque su obra influyó en corrientes artísticas futuras como lo fue el cubismo. También debemos hablar de Henri de Toulouse-Lautree, que es el creador del cartel. Siendo sus primeros y famosos carteles, los que hace para el Moulin Rouge. Lo más característico de su pintura es su dibujo rápido,que produce sensación de obra no concluida.
Otro de los representantes del postimpresionismo de gran relevancia es Paul Gauguin, cuyo interés por conocer otras tierras fue una constante en su vida. Gauguin pone de manifiesto en su obra la importancia que da al color, elemento que utiliza arbitrariamente en amplias zonas planas claramente delimitadas por la línea, sin necesidad de atenerse a las normas que impone la realidad ni interesarse por los problemas derivados de la perspectiva. Este será el rasgo esencial de una corriente pictórica que aparecerá poco tiempo después, y que se conoce con el nombre de Fauvismo. Gauguin mantiene una turbulenta amistad con Van Gogh, pintor de quien es necesario hacer un análisis más profundo por la dimensión casi legendaria que ha alcanzado su figura.
Es uno de los pintores que más incidencia han tenido en el desarrollo de la pintura durante todo el siglo XX. Su turbulenta biografía está inexorablemente ligada a su producción artística, y resulta difícil estudiarlas por separado. La mencionada amistad que mantiene con Gauguin, les lleva incluso a vivir juntos, aunque pronto las divergencias entre ellos aparecen por los difíciles y diferentes caracteres de ambos.
De entre sus primeras obras,la más representativa es “Los comedores de patatas”, en la que demuestra las influencias del claroscuro. Van Gogh siente una profunda fascinación por su propio rostro y es uno de los pintores que en más ocasiones se ha autorretratado. Las personas que lo rodearon fueron retratadas también por él y un claro ejemplo es “El doctor Gachet”.
Las naturalezas muertas son otro de los temas importantes de su producción artística. Uno de los más bellos ejemplos, es “Los girasoles”, en el que demuestra un gran dominio en el manejo del amarillo,uno de los colores más importantes en su obra al que atribuía un significado místico.
También es necesario hablar de sus paisajes, que de alguna manera nos revelaban su estado mental, como “La llanura del Crau”,paisaje que transmite serenidad y en definitiva un cierto equilibrio, al contrario de “Los dos cipreses” que demuestra la inestabilidad psíquica del pintor.
La capacidad para expresar a través de su agitada pincelada y de sus intensos colores es lo que le convirtió en el origen de una corriente surgida poco tiempo después: El Expresionismo.
Convirtió la pintura en una forma de liberación,en un mecanismo de expresión. Su pintura se caracteriza por su pincelada corta y vigorosa en forma de coma, los contornos se presentan temblorosos, amplias áreas de colores planos que son reflejo de su propia inestabilidad psíquica.
Por último, en referencia al caso español, no podemos hablar de una generación expresamente impresionista en nuestro país,pero sí de pintores que incorporan elementos impresionistas y postimpresionistas a sus obras; y el pintor que mejor representa el Impresionismo en España es, sin duda alguna, Joaquín Sorolla.